¿Qué accidentes no tendrán la consideración de accidentes de trabajo?
Los accidentes de trabajo son aquellos que suceden durante el desempeño de las labores propias del trabajo y que no están cubiertos por la seguridad social. Sin embargo, existen determinados accidentes que no tienen la consideración de accidentes de trabajo. A continuación, se enumeran algunos de ellos:
- Los accidentes ocurridos durante el trayecto entre la residencia y el lugar de trabajo, a menos que el empleado utilice el vehículo de la empresa o el transporte público.
- Los accidentes ocurridos en el horario de almuerzo o en los descansos.
- Los accidentes ocurridos en el horario de trabajo, pero que no están relacionados con las labores específicas del trabajador.
- Los accidentes ocurridos fuera del horario de trabajo, aunque el trabajador esté en el lugar de trabajo.
- Los accidentes ocurridos durante el desempeño de labores propias del trabajo, pero que no están cubiertos por la seguridad social.
Por lo tanto, para que un accidente sea considerado como un accidente de trabajo, debe ocurrir durante el horario de trabajo y estar relacionado con las labores específicas del trabajador. Además, el trabajador debe estar cubierto por la seguridad social.
¿Qué casos no son considerados accidentes de trabajo?
Los accidentes de trabajo son aquellos sucesos ocurridos durante el desempeño de una labor remunerada, en el ámbito laboral. No obstante, existen ciertos casos en que el trabajador no puede ser considerado como víctima de un accidente de trabajo.
Enfermedades profesionales
Se trata de aquellas enfermedades que se adquieren en el lugar de trabajo y que son consecuencia directa del mismo. En estos casos, el empleador debe asumir los costes médicos y de indemnización. Algunas de las enfermedades profesionales más comunes son la bronquitis, la neumoconiosis o el asbestosis.
Para que sea considerada como enfermedad profesional, debe acreditarse que la enfermedad se adquirió en el lugar de trabajo y que existe una relación directa entre la enfermedad y el trabajo realizado.
Accidentes ocurridos en el trayecto
Los accidentes que ocurren en el trayecto entre el domicilio y el lugar de trabajo, o viceversa, no son considerados accidentes de trabajo. No obstante, si el trabajador utiliza un vehículo de la empresa para realizar el trayecto, y sufre un accidente con el mismo, sí será considerado como accidente de trabajo.
En el caso de los accidentes ocurridos durante el trayecto, el trabajador deberá acreditar que el accidente ocurrió durante el trayecto y que el mismo se debió a una causa ajena a su voluntad.
Enfermedades mentales o psicosomáticas
Las enfermedades mentales o psicosomáticas no son consideradas como accidentes de trabajo, aunque sean consecuencia del estrés o la ansiedad derivados del trabajo. No obstante, para que esto sea así, debe acreditarse que la enfermedad es consecuencia directa del trabajo y que el trabajador no padecía la misma antes de iniciar su relación laboral.
En el caso de las enfermedades mentales o psicosomáticas, el trabajador deberá acreditar que la enfermedad se debió al trabajo y que éste fue el principal factor desencadenante de la misma.
Accidentes ocurridos fuera del horario de trabajo
Los accidentes ocurridos fuera del horario de trabajo no son considerados accidentes de trabajo. No obstante, si el accidente ocurre en el lugar de trabajo, pero fuera del horario de trabajo, sí será considerado como accidente de trabajo.
En el caso de los accidentes ocurridos fuera del horario de trabajo, el trabajador deberá acreditar que el accidente ocurrió en el lugar de trabajo y que la causa del mismo fue ajena a su voluntad.
Accidentes ocurridos durante el descanso
Los accidentes ocurridos durante el descanso no son considerados accidentes de trabajo. No obstante, si el accidente ocurre en el lugar de trabajo, pero durante el horario de trabajo, sí será considerado como accidente de trabajo.
En el caso de los accidentes ocurridos durante el descanso, el trabajador deberá acreditar que el accidente ocurrió en el lugar de trabajo y que la causa del mismo fue ajena a su voluntad.
Actos ilícitos o dolosos
Los accidentes ocurridos como consecuencia de un acto ilícito o doloso no son considerados accidentes de trabajo. No obstante, si el accidente ocurre en el lugar de trabajo, pero no como consecuencia de un acto ilícito o doloso, sí será considerado como accidente de trabajo.
En el caso de los accidentes ocurridos como consecuencia de un acto ilícito o doloso, el trabajador deberá acreditar que el accidente ocurrió en el lugar de trabajo y que la causa del mismo fue ajena a su voluntad.
¿Qué supuestos están considerados como accidentes de trabajo?
Los accidentes de trabajo son, según la definición legal, "aquellos sucesos repentinos que sobrevengan por causa o con ocasión del trabajo y que produzcan en el trabajador lesiones corporales o perturbaciones funcionales que generen incapacidad temporal para el trabajo o la muerte". Aunque en una primera aproximación pudiera parecer que el concepto de accidente de trabajo es claro y unívoco, la realidad es que la jurisprudencia y la doctrina han ido precisando sus límites a lo largo de la historia.
Así, aunque inicialmente se consideraban accidentes de trabajo únicamente aquellos sucesos que tuvieran lugar en el lugar y en el horario de trabajo, con el tiempo se fue ampliando el concepto para incluir aquellos sucesos ocurridos en el desplazamiento al lugar de trabajo, en el tiempo de descanso o en el camino de regreso a casa. No obstante, aún persisten ciertas discusiones en relación con este último supuesto, y es que si bien es cierto que el regreso a casa después del trabajo forma parte de la jornada laboral, también lo es que el trabajador no está prestando su actividad en ese momento.
En cualquier caso, lo importante a tener en cuenta es que, para que un suceso pueda ser considerado como un accidente de trabajo, es necesario que exista un nexo causal entre el mismo y el trabajo del afectado. Es decir, que el accidente se haya producido por causa del trabajo o a consecuencia de él. Sin embargo, aunque este nexo causal sea evidente, no todos los sucesos que se producen en el ámbito laboral son considerados como accidentes de trabajo. Así, por ejemplo, enfermedades profesionales o patologías preexistentes no son consideradas como tales.
En resumen, podemos decir que, a grandes rasgos, los accidentes de trabajo son aquellos sucesos que se producen en el ámbito laboral y que tienen como causa o consecuencia el trabajo del afectado. No obstante, la jurisprudencia y la doctrina han precisado algunos supuestos en relación con este concepto.
¿Qué hecho tiene que darse para que un accidente sea considerado accidente de trabajo?
En primer lugar, para que un accidente sea considerado accidente de trabajo, tiene que haber ocurrido durante el horario laboral. Esto significa que, si el accidente ocurre durante el trayecto al trabajo o durante el descanso, no será considerado accidente de trabajo. En segundo lugar, el accidente tiene que ser causado por el trabajo que se está realizando. Esto significa que, si el accidente es causado por el mal estado de las instalaciones o por el comportamiento de otros trabajadores, no será considerado accidente de trabajo. En tercer lugar, el accidente tiene que ser la causa de una lesión o enfermedad. Esto significa que, si el accidente no tiene consecuencias físicas o si las consecuencias son leves, no será considerado accidente de trabajo.¿Buscas trabajo?
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