¿Qué pasa si se me acaba el contrato y no he disfrutado de las vacaciones?
Lo primero que debes entender es que las vacaciones son un derecho que se gana al trabajar, y que no se pierde al cambiar de trabajo. Si se nos acaba el contrato antes de tiempo y no hemos disfrutado de nuestras vacaciones simplemente hay que reclamar el importe de lo que nos corresponda. Para ello, hay que acudir al Servicio de Inspección de Trabajo y solicitar una reclamación para que se nos abone el importe total de las vacaciones no disfrutadas.
En el caso de que la empresa con la que teníamos contratado el trabajo se niegue a abonarnos el importe de nuestras vacaciones, tendremos que acudir a la vía judicial para exigir el pago de las mismas. La vía judicial puede ser un proceso largo y costoso, por lo que se recomienda primero acudir a la Inspección de Trabajo para ver si hay una solución amistosa.
Por otro lado, si te has visto obligado a cambiar de trabajo antes de disfrutar de tus vacaciones, tendrás la opción de acudir al nuevo trabajo y pedir que se te abonen las vacaciones que te correspondan. Esto suele ser una práctica común y suele ser aceptado por la empresa, ya que es la forma más fácil y rápida de solventar el problema.
En definitiva, se trata de un derecho y hay que hacer todo lo posible por exigirlo. Si tu empresa actual no quiere abonarte el importe de tus vacaciones, acude a la Inspección de Trabajo para ver si hay una solución amistosa, y si no es así acude a la vía judicial para exigir lo que te corresponde.
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