¿Que se entiende por guarda legal?

La guarda legal es un término utilizado en el ámbito del derecho y se refiere a la responsabilidad de cuidar y proteger a una persona, especialmente a un menor de edad o a una persona incapacitada.

La guarda legal puede ser otorgada por un juez en casos de divorcio o separación de padres, para determinar quién tendrá la custodia del menor. En este caso, la persona que obtiene la guarda legal se convierte en responsable por la crianza, educación y bienestar del menor.

En otros casos, la guarda legal puede ser otorgada a un tutor o a un familiar cercano, en situaciones donde una persona no puede tomar decisiones por sí misma debido a una incapacidad mental o física. En estos casos, la persona a cargo debe tomar decisiones que sean en el mejor interés de la persona a su cuidado.

Es importante tener en cuenta que la guarda legal es un asunto serio y debe ser tomada en serio. La persona a cargo debe tener la capacidad y habilidad de proveer cuidado y protección adecuados, así como estar dispuesto a tomar decisiones difíciles cuando sea necesario.

¿Quién puede pedir la guarda legal?

La guarda legal de un menor de edad es una responsabilidad muy importante que solo puede ser asumida por ciertas personas en situaciones específicas. La ley española establece que la persona que tiene la patria potestad del menor es la responsable de la guarda legal, pero en algunos casos, puede pedirle a un juez que nomee a otra persona como tutor legal del menor.

Si la persona con la patria potestad no puede proporcionar el cuidado adecuado al menor, un tercero puede pedir la guarda legal. Esto puede suceder si la persona con la patria potestad ha sido incapacitada o si ha sido declarada culpable de abuso o negligencia hacia el menor. En estos casos, un familiar cercano, como un abuelo o un tío, puede pedir la guarda legal del menor.

Además, los servicios sociales también pueden pedir la guarda legal de un menor en situaciones en las que el bienestar del menor está en riesgo. Estas situaciones pueden incluir el abuso o la negligencia por parte de la persona con la patria potestad, o si los padres no pueden proporcionar el cuidado adecuado debido a problemas de salud mental o física.

En cualquier caso, la solicitud de guarda legal debe ser presentada ante un juez de familia. El juez investigará la situación y determinará si se debe otorgar la guarda legal a la persona que la solicita. Es importante recordar que la guarda legal es una responsabilidad seria y que el bienestar del menor es la consideración principal en todo momento.

¿Cuándo termina la guarda legal?

La guarda legal es el conjunto de derechos y obligaciones que recaen sobre los padres respecto a sus hijos menores de edad. Estos derechos y obligaciones tienen una duración determinada y terminan en el momento en que los hijos alcanzan la mayoría de edad.

La mayoría de edad en España se adquiere a los 18 años, lo que significa que la guarda legal de los padres termina cuando sus hijos cumplen esta edad. Sin embargo, existen algunas excepciones a esta regla, como por ejemplo cuando los hijos tienen una discapacidad y necesitan la tutela de sus padres durante más tiempo.

Es importante tener en cuenta que la finalización de la guarda legal no significa que los padres dejen de tener responsabilidades relacionadas con sus hijos. Por ejemplo, seguimos siendo responsables de su educación y su bienestar hasta que sean independientes económicamente.

¿Cuántas veces se puede pedir reducción de jornada por guarda legal?

La reducción de jornada por guarda legal es un derecho que tienen los trabajadores en España, siempre y cuando tengan a su cargo a un hijo menor de 12 años, una persona con discapacidad física, psíquica o sensorial, o un familiar en situación de dependencia reconocida por la ley.

Esta medida permite al trabajador reducir su jornada laboral en un máximo del 50% de su jornada ordinaria, con la consecuente disminución de su salario proporcionalmente. Sin embargo, existe una duda común sobre cuántas veces se puede pedir esta reducción de jornada.

En principio, no existe límite en cuanto al número de veces que se puede solicitar la reducción de jornada por guarda legal. Es decir, si se cumplen los requisitos mencionados anteriormente, el trabajador puede pedir esta medida tantas veces como sea necesario mientras dure la situación de guarda legal.

Es importante destacar que el trabajador debe comunicar a la empresa esta situación y solicitar la reducción de jornada con al menos 15 días de antelación, salvo casos de urgencia debidamente justificados. Además, la empresa puede proponer la distribución horaria dentro de los límites establecidos por el trabajador, pero siempre teniendo en cuenta las necesidades de organización de la empresa.

En resumen, los trabajadores que tengan a su cargo a un menor de 12 años, una persona con discapacidad o un familiar en situación de dependencia reconocida por la ley pueden solicitar la reducción de jornada por guarda legal tantas veces como sea necesario mientras dure esa situación. Sin embargo, es importante comunicar esta situación a la empresa con 15 días de antelación y tener en cuenta las necesidades de organización de la misma.

¿Qué es una reducción de jornada por guarda legal?

Una reducción de jornada por guarda legal es un derecho que tienen los trabajadores para adaptar su horario laboral a las necesidades del cuidado de hijos menores de edad, familiares enfermos o dependientes.

Esta medida se contempla en el Estatuto de los Trabajadores y debe ser solicitada al empleador, quien está obligado a concederla siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos.

La reducción de jornada puede ser de hasta el 50% de la jornada laboral y puede ejercerse de manera continua o discontinua, según convengan las partes implicadas.

Es necesario acreditar la existencia de la situación que justifica la reducción de jornada y esta debe ser solicitada con un mínimo de 15 días de antelación.

El trabajador que disfruta de esta medida tiene derecho a la retribución proporcional a la jornada reducida y a la conservación de su puesto de trabajo durante el tiempo que dure la reducción.

En resumen, la reducción de jornada por guarda legal es una medida que permite a los trabajadores conciliar su vida laboral y familiar, y es un derecho que está protegido por la ley.