¿Cuándo se puede llamar acoso laboral?
El acoso laboral, también conocido como mobbing, es una práctica cada vez más común en el mundo laboral. Se puede definir como una serie de conductas repetidas y deliberadas de un superior o compañero de trabajo hacia un trabajador, con el fin de intimidarlo, humillarlo, marginarlo o hacerlo sentir incómodo en su puesto de trabajo.
Para que se pueda considerar acoso laboral, estas conductas deben ser continuas y prolongadas en el tiempo, lo que provoca en la víctima un grave perjuicio emocional, psicológico e incluso físico. Además, estas conductas deben producir un ambiente de trabajo hostil y generar una situación laboral insostenible para la víctima.
Entre las conductas más comunes de acoso laboral se encuentran la descalificación del trabajo realizado por la víctima, la asignación de tareas imposibles de cumplir, la difusión de rumores falsos sobre el trabajador y el trato desigual respecto a otros compañeros. El objetivo del acosador es debilitar emocionalmente a la víctima, desestabilizarla y desmotivarla.
Es importante destacar que el acoso laboral es ilegal y puede ser denunciado. Por ello, las empresas deben contar con protocolos claros para prevenir, detectar y tratar los casos de acoso laboral. También es fundamental que los trabajadores estén informados y conozcan sus derechos en caso de ser víctimas de esta práctica.
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