¿Qué es la movilidad funcional descendente?
La movilidad funcional descendente es una forma de movilidad física en la que el cuerpo se mueve hacia abajo o hacia adelante. Se puede lograr mediante el uso de una variedad de técnicas, como el estiramiento, la relajación y la torsión. También se puede lograr mediante el uso de aparatos especiales, como las escaleras elípticas y las cintas de correr. La movilidad funcional descendente se puede utilizar para mejorar la postura y la coordinación, así como para tratar problemas físicos, como el dolor de espalda y las articulaciones. También se puede utilizar para mejorar el rendimiento en el deporte y la actividad física.
La movilidad funcional descendente se puede utilizar para aumentar la flexibilidad, ya que permite que el cuerpo se mueva en un rango de movimiento más amplio. También se puede utilizar para aumentar la fuerza, ya que permite que el cuerpo utilice músculos más grandes y más fuertes. La movilidad funcional descendente también se puede utilizar para mejorar la coordinación, ya que permite que el cuerpo se mueva de forma más eficiente. La movilidad funcional descendente también se puede utilizar para mejorar el equilibrio, ya que permite que el cuerpo se mantenga en una posición más estable.
¿Qué se considera movilidad funcional?
La movilidad funcional es una capacidad física general que se refiere a la capacidad de realizar movimientos libres y coordinados de manera eficiente. En otras palabras, se trata de la capacidad de moverse de un lugar a otro de manera eficiente y segura.
La movilidad funcional es una habilidad importante para la vida diaria, ya que nos permite realizar tareas básicas como caminar, correr, agarrar objetos y muchas otras. También es importante para la salud general, ya que nos permite mantenernos activos y evitar lesiones.
Hay muchas maneras de mejorar la movilidad funcional, pero una de las formas más efectivas es a través de ejercicios de fortalecimiento y estiramiento. Los ejercicios de fortalecimiento ayudan a mejorar la fuerza y la resistencia, mientras que los estiramientos ayudan a mejorar la flexibilidad. Otros factores que pueden influir en la movilidad funcional son la edad, el peso, la forma física y las condiciones médicas.
¿Qué dice el artículo 39 del Estatuto de los Trabajadores?
El artículo 39 del Estatuto de los Trabajadores regula el derecho a la igualdad de trato en el empleo y la prohibición de discriminación. Se trata de un derecho fundamental de los trabajadores que tiene como finalidad garantizar la no discriminación en el empleo, tanto por motivos de raza, sexo, religión, opinión política, orientación sexual, etc.
Este derecho se extiende a todos los ámbitos relacionados con el empleo, desde la selección de candidatos para un puesto de trabajo, hasta el acceso a la formación o la promoción en el empleo. Asimismo, el artículo 39 del Estatuto de los Trabajadores establece la obligación de los empresarios de garantizar la igualdad de trato en el empleo y de adoptar las medidas necesarias para evitar cualquier forma de discriminación.
En el caso de que se produzca una situación de discriminación, el trabajador afectado podrá presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo o interponer una demanda ante los tribunales para que se reconozca su derecho y se le indemnice por los daños y perjuicios sufridos.
¿Cuántos km me pueden desplazar de mi puesto de trabajo?
La Ley General de Trabajo no establece un límite de kilómetros a la distancia que puede haber entre el lugar de trabajo y el domicilio del trabajador. No obstante, en casos específicos sí se pueden establecer límites. Así lo determina el artículo 75 de la Ley General de Trabajo:
El lugar de trabajo de un trabajador sujeto a relación de trabajo se determinará mediante convenio individual de trabajo y deberá ser adecuado a las características de su actividad y a las necesidades del trabajador.
En consecuencia, si una relación de trabajo se establece mediante un convenio individual de trabajo, es el propio trabajador quien debe aceptar el lugar de trabajo, y si éste se encuentra a una distancia excesiva de su domicilio, puede negarse a aceptarlo. No obstante, en la práctica es difícil que un trabajador se niegue a aceptar un trabajo por esta causa, ya que de hacerlo así podría perder la oportunidad de trabajo y, en consecuencia, su fuente de ingresos.
En aquellos casos en que el trabajador no pueda desplazarse al lugar de trabajo por causas de fuerza mayor, el empleador deberá proporcionarle el trabajo en el domicilio del trabajador. Así lo establece el artículo 76 de la Ley General de Trabajo:
Cuando un trabajador no pueda desplazarse al lugar de trabajo por causas de fuerza mayor, el empleador deberá proporcionarle el trabajo en el domicilio del trabajador.
Sin embargo, en este caso el empleador no está obligado a pagar los gastos de desplazamiento del trabajador, ya que éste es el que no puede desplazarse por causas ajenas a la voluntad del empleador.
Por lo tanto, en la práctica, si un trabajador se encuentra en esta situación, lo más probable es que el empleador le despida, ya que el trabajo a domicilio no es rentable para la empresa.
¿Qué pasa si me niego a hacer un trabajo que no me corresponde?
Me niego a hacer un trabajo que no me corresponde. Si me pidieran que hiciera algo que no está dentro de mi área de competencia, lo rechazaría. No me gustaría hacer un trabajo mal hecho, y no me siento cómodo haciendo algo que no estoy seguro de que pueda hacer bien. Si creo que no estoy capacitado para hacer un buen trabajo, entonces prefiero no hacerlo en absoluto. No quiero decepcionar a nadie ni hacer un trabajo que no esté a la altura de las expectativas.
Rechazaría el trabajo, pero no me sentiría mal por ello. Si alguien me pidiera que hiciera algo fuera de mi campo de experiencia, se lo diría claramente y trataría de encontrar a otra persona más adecuada para el trabajo. No me gustaría tomar el trabajo y luego fallar en él, así que prefiero no aceptarlo en absoluto. Es mejor ser honesto y decir que no se puede hacer algo, que aceptar el trabajo y luego no poder hacerlo bien.
En general, es mejor no hacer algo a hacerlo mal. Si no estoy seguro de poder hacer un buen trabajo, entonces prefiero no hacerlo. No quiero decepcionar a nadie ni hacer un trabajo que no esté a la altura de las expectativas. Prefiero ser honesto y decir que no se puede hacer algo, que aceptar el trabajo y luego no poder hacerlo bien.
¿Buscas trabajo?
¿Quieres encontrar trabajo?
¿Quieres encontrar trabajo?