¿Cómo dejar el trabajo en el periodo de prueba?

En la mayoría de los lugares de trabajo, se espera que los nuevos empleados pasen por un período de prueba de uno a tres meses antes de que se les otorgue un contrato de trabajo. Durante este tiempo, ambas partes pueden decidir si el empleo es un buen ajuste. Sin embargo, en algunos casos, puede ser evidente que el trabajo no es adecuado para usted, y puede ser necesario dejarlo. Si está considerando dejar su trabajo durante el período de prueba, siga estos consejos para hacerlo de la manera más profesional y efectiva posible.

Evalúe sus motivos

Antes de tomar la decisión de dejar su trabajo, evalúe sus motivos. ¿Es el trabajo realmente lo que esperaba? ¿Te has sentido en desacuerdo con la forma en que se manejan las cosas? ¿Te has sentido abrumado por la cantidad de trabajo? ¿Ha habido un cambio en el ambiente de trabajo que te haga sentir incómodo?

En algunos casos, es posible que pueda hablar con su supervisor o gerente para abordar sus preocupaciones y tratar de resolverlas. Si este no es el caso, o si ha habido un intento de solución y no ha funcionado, puede ser necesario dejar el trabajo.

Considere el impacto

Antes de tomar una decisión, considere el impacto de su salida. ¿Cómo afectará su carrera? ¿Será difícil encontrar otro trabajo? ¿Tiene alguna compensación por dejar el trabajo, como una prima de reembolso de gastos de viaje?

En algunos casos, puede valer la pena dejar el trabajo a corto plazo para proteger su salud y bienestar a largo plazo. Sin embargo, si tiene dudas sobre si dejar el trabajo es la mejor opción para usted, puede hablar con un asesor de carrera o un consejero profesional para obtener consejos.

Hágalo de manera profesional

Una vez que haya decidido dejar el trabajo, hágalo de la manera más profesional y efectiva posible. En primer lugar, hable con su supervisor o gerente para comunicarle su decisión. Asegúrese de ser claro sobre sus motivos y de dar suficiente aviso para que puedan encontrar a alguien para cubrir su puesto.

Segundo, prepárese una carta de renuncia. En la carta, explique sus motivos para dejar el trabajo y agradezca la oportunidad de haber trabajado allí. Asegúrese de mantener un tono respetuoso y profesional en todo momento.

Por último, si tiene la oportunidad, ofrezca ayuda para cubrir su puesto durante el período de transición. Por ejemplo, puede ofrecerse para entrenar a alguien nuevo o hacer un trabajo especial para asegurarse de que todo esté en orden antes de irse.

¿Qué pasa si me voy del trabajo durante el periodo de prueba?

En la mayoría de los lugares de trabajo, el periodo de prueba es una etapa crucial antes de que un empleado pueda considerarse de manera oficial parte del personal. Durante este tiempo, el empleador puede evaluar si el candidato es un buen ajuste para el puesto y la empresa. Si el rendimiento del empleado es deficiente o si no cumple con las expectativas del empleador, es probable que se le despedirá.

Sin embargo, si el empleado decide renunciar durante el periodo de prueba, la situación es un poco más complicada. Aunque el empleado no está legalmente obligado a permanecer en el trabajo, es posible que haya consecuencias negativas si decide irse. Algunas de estas consecuencias pueden ser:

• Dañar la reputación: Si el empleado renuncia a un trabajo antes de que termine el periodo de prueba, es posible que esto dañe su reputación. Las empresas tienden a compartir información sobre los empleados, y si un empleado tiene un historial de renunciar a los trabajos durante el periodo de prueba, esto puede hacer que las futuras empresas sean reacias a contratarlo.
• Perder la oportunidad de obtener una buena referencia: Si el empleado renuncia a un trabajo, es posible que el empleador no esté dispuesto a proporcionar una referencia positiva. Las referencias son importantes para los empleados, y si un empleado no puede obtener una referencia positiva de un trabajo anterior, esto puede hacer que sea más difícil conseguir un nuevo trabajo.
• Reembolso de los gastos de viaje: Si el empleado renuncia a un trabajo y havia viajado para asistir a una entrevista, es posible que tenga que reembolsar al empleador los gastos de viaje. Esto se aplica a menudo si el empleado renuncia antes de completar el periodo de prueba.

En general, es mejor evitar renunciar a un trabajo durante el periodo de prueba. Si el empleado no está satisfecho con el trabajo o tiene problemas con el empleador, es mejor hablar con el empleador y ver si se puede llegar a un acuerdo. Si el empleado decide renunciar, debe hacerlo de manera profesional y dejar una buena impresión.

¿Cómo renunciar en mi periodo de prueba?

Aunque renunciar durante el período de prueba puede parecer una buena idea en el momento, a menudo es mejor esperar hasta que el período de prueba haya terminado. Las empresas tienden a tomar esto como una falta de compromiso por tu parte y puede ser difícil de explicar a futuros empleadores. No obstante, si has decidido que quieres renunciar, aquí tienes algunos consejos para hacerlo de la manera más profesional posible.

Elige tu momento - No renuncies en medio de una crisis o cuando tu jefe está ocupado. Eso solo hará que tu jefe se sienta más frustrado. En lugar de eso, elige un momento en el que tu jefe pueda prestarte toda su atención y tenga tiempo para hacer preguntas. Lo ideal es hacerlo al final del día, para que tu jefe tenga tiempo para procesar la información.

Sé honesto - No trates de mentir o de dar excusas falsas. Si no te gusta el trabajo o no te sientes cómodo con la empresa, dielo de forma directa. No obstante, evita criticar al jefe o a la empresa. En su lugar, enfócate en lo que quieres y en lo que no te está dando el trabajo actual.

Sé educado - Aunque puedas estar frustrado, no pierdas la compostura. No grites, no grites y no amenaces. Eso solo hará que tu jefe se sienta más frustrado y podría dificultar las cosas para ti a futuro. En su lugar, sé respetuoso y profesional.

Explica tus razones - Dale a tu jefe una explicación honesta de por qué estás dejando el trabajo. Si no te sientes cómodo diciéndoselo a él o ella, puedes enviar un correo electrónico o una carta. Pero recuerda, si puedes hablar cara a cara, es mejor hacerlo.

Ofrécete para ayudar - Aunque no te obliguen a hacerlo, ofrecerte para ayudar a tu jefe durante el proceso de transición puede ser un gesto muy profesional. Por ejemplo, puedes ofrecerte para entrenar a tu reemplazo o para terminar cualquier proyecto en el que estés trabajando.

Sé agradecido - Aunque estés dejando el trabajo, probablemente haya algo o alguien de la empresa por lo que estés agradecido. Asegúrate de mencionar eso en tu conversación de renuncia. De esta forma, tu jefe se sentirá mejor y podrás dejar las cosas en buenos términos.