¿Qué sanción puede imponerse a la empresa por no disponer de un sistema de registro de jornada?

Por no disponer de un sistema de registro de jornada, la empresa puede ser sancionada con multas de hasta 300 euros por trabajador. La sanción se impone cuando se comprueba que la empresa no cumple con la obligación de llevar un registro de la jornada de sus trabajadores. Esta obligación está establecida en el Real Decreto-ley 2/2015, de 23 de octubre, por el que se modifica el texto refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social. El importe de la multa se gradúa en función del número de trabajadores afectados y de si la falta de registro se produce por primera vez o es reincidente. En el caso de que la falta de registro afecte a un solo trabajador, la sanción será de 100 euros. Si la falta de registro afecta a dos o tres trabajadores, la sanción será de 200 euros. Y si la falta de registro afecta a más de tres trabajadores, la sanción será de 300 euros. Asimismo, la sanción se duplicará en caso de reincidencia en el incumplimiento de la obligación de llevar un registro de la jornada de los trabajadores en el plazo de un año desde que se impuso la primera sanción.

¿Qué pasa si el trabajador no registra su jornada?

En España, el trabajador tiene la obligación de llevar un control de su jornada laboral. Según el artículo 35 del ET, el registro de la jornada de trabajo es obligatorio para todos los trabajadores a jornada completa o a tiempo parcial, salvo aquellos que desarrollen su actividad en el hogar del empleador. Para ello, el empleador debe facilitarles los medios necesarios.

El trabajador que no cumpla con su obligación de registrar su jornada está cometiendo un falta leve. Esto significa que, en caso de ser denunciado por el empleador, será sancionado con una multa de entre 601 y 3.000 euros. No obstante, si el trabajador no lleva un control de su jornada y el empleador no lo denuncia, no será sancionado.

Aunque el registro de jornada es obligatorio, en algunos casos el trabajador puede no registrar su jornada sin que esto suponga una falta. Por ejemplo, si el trabajador realiza una jornada no habitual (por ejemplo, una jornada de guardia o de noche) o si está exento de registro de jornada (por ejemplo, si es un trabajador a domicilio o si el empleador no le ha facilitado los medios necesarios para registrar su jornada).

En cualquier caso, es importante que el trabajador tenga en cuenta que el no registro de jornada puede ser un indicador de que el empleador está cometiendo un fraude. Por ejemplo, si el trabajador trabaja más horas de las que constan en su registro de jornada, el empleador está cometiendo un fraude de horas extras. En este caso, el trabajador puede denunciar el fraude y, si la denuncia es admitida, el empleador será sancionado.

¿Qué me pasa si firmó un horario falso en mi trabajo?

La mayoría de los empleadores requieren que sus empleados firmen un formulario de horario o reloj de asistencia para documentar sus horas de trabajo. Si un empleado falsifica su horario de trabajo, es decir, si el empleado firma el formulario de horario o reloj de asistencia indicando que trabajó más horas de las que realmente trabajó, el empleado está cometiendo un acto de fraude.

Si se descubre que un empleado ha cometido fraude al firmar un horario falso, el empleado puede enfrentar consecuencias disciplinarias. Las consecuencias disciplinarias pueden variar de una amonestación verbal a la terminación del empleo, y generalmente dependen de la política de fraude de la empresa y de la cantidad de dinero que el empleado haya defraudado.

Por ejemplo, si un empleado tiene una política de empresa que establece que el fraude es motivo de despido inmediato, y el empleado falsifica su horario de trabajo indicando que trabajó 10 horas cuando en realidad solo trabajó 8, el empleado será despedido por haber cometido fraude. Sin embargo, si el empleado falsifica su horario de trabajo indicando que trabajó 8 horas cuando en realidad solo trabajó 6, es probable que la empresa solo le imponga una amonestación verbal, ya que el empleado solo cometió un acto menor de fraude.

¿Como debe ser el registro de jornada?

Los trabajadores tienen derecho a un registro de jornada en el que conste la entrada, la salida y la pausa para comer. Este registro de jornada debe estar a disposición del trabajador y debe ser acreditado mediante firma.

La jornada ordinaria de trabajo de un trabajador es de 40 horas a la semana. La jornada diaria no puede ser superior a 9 horas.

La jornada de trabajo nocturna es la que se realiza entre las 10 de la noche y las 6 de la madrugada. El trabajo nocturno supone una jornada de 7 horas como máximo.

El trabajo a tiempo parcial es la modalidad de contrato en la que el trabajador trabaja menos de 35 horas a la semana.

El trabajo a tiempo completo es la modalidad de contrato en la que el trabajador trabaja 35 horas o más a la semana.

La jornada reducida es aquella en la que el trabajador trabaja menos de 40 horas a la semana.

La jornada intensiva es aquella en la que el trabajador trabaja más de 40 horas a la semana.

El horario partido es aquel en el que el trabajador trabaja por la mañana y por la tarde.

El horario continuo es aquel en el que el trabajador trabaja de forma ininterrumpida durante todo el día.

El trabajo a destajo es aquel en el que el trabajador es remunerado por una cantidad de unidades producidas, y no por el tiempo trabajado.

El trabajo por turnos es aquel en el que el trabajador trabaja en diferentes turnos durante el día, la semana o el mes.

¿Quién está obligado a fichar en el trabajo?

Los trabajadores de una empresa están obligados a fichar cuando entran y salen de la empresa. De esta forma se puede controlar la asistencia y la puntualidad de los empleados. Aunque la legislación no obliga a fichar, sí que lo recomienda para que el patrón pueda demostrar que ha cumplido con sus obligaciones. En algunos casos, el incumplimiento del contrato laboral puede ser considerado falta grave y dar lugar a la extinción del contrato.

Existen diferentes formas de fichar, desde el reloj de fichar tradicional hasta los sistemas informáticos más modernos. En cualquier caso, lo importante es que el trabajador pueda demostrar su asistencia y puntualidad en el trabajo.