¿Qué tengo que hacer si se me acaba el contrato estando de baja?

En primer lugar, lo más importante es no ponerse nervioso. Hay que tener en cuenta que estar de baja no es una situación permanente y, por lo tanto, no hay que tomar ninguna decisión apresurada. Lo primero que hay que hacer es informarse sobre los derechos que se tienen en este caso. En España, el contrato de trabajo puede acabarse por varias razones:

• Porque se ha cumplido el tiempo estipulado en él.
• Porque se ha terminado la obra o el servicio para el que se contrató.
• Porque se ha produido un despido.
• Porque se ha presentado la dimisión por parte del trabajador.

En cualquier caso, cuando un contrato termina y el trabajador está de baja, tiene derecho a que se le prorrogue el contrato hasta que pueda reincorporarse a su puesto de trabajo. Esto es lo que se conoce como contrato en suspensión. Para que se pueda aplicar este tipo de contrato, es necesario que el trabajador esté de baja por enfermedad y que, además, dicha enfermedad esté debidamente justificada.

En el caso de que el trabajador no esté de baja por enfermedad, sino por algún otro motivo (por ejemplo, porque está en excedencia por maternidad o paternidad), el contrato se dará por terminado en el momento en que finalice el periodo de suspensión. Esto significa que, en el momento en que el trabajador pueda reincorporarse a su puesto de trabajo, deberá volver a buscar empleo. No obstante, en este caso, el trabajador tiene derecho a un subsidio por desempleo.

Por último, hay que tener en cuenta que, en algunos casos, el trabajador puede acordar con la empresa una reducción de jornada o un permiso retribuido en lugar de una suspensión del contrato. Esto es algo que deberá negociar directamente con la empresa.

¿Qué pasa si estoy de baja y se me acaba el contrato?

En primer lugar, debes saber que no estás obligado a renovar tu contrato si estás de baja laboral. Si tu empresa te obliga a hacerlo, estaría cometiendo una infracción y podrías denunciarla. No obstante, si decides renovarlo, debes tener en cuenta que no se podrán modificar las condiciones laborales que figuraban en el contrato original. Es decir, si en tu contrato se estipulaba una jornada laboral de 40 horas semanales, al renovarlo no podrán modificarla a 35 horas.

En segundo lugar, si tu contrato se acaba mientras estás de baja, debes saber que tienes derecho a que se te prolongue hasta que vuelvas a trabajar. No obstante, esto sólo será posible si se cumplen una serie de requisitos, como que la baja no sea voluntaria, que no se deba a un despido improcedente, que no se trate de una baja por maternidad o paternidad, entre otros. Si cumples estos requisitos, tu empresa deberá prolongar tu contrato hasta que vuelvas a trabajar, manteniendo las mismas condiciones laborales que tenías antes de estar de baja.

En cualquier caso, es importante que te informes bien de todos tus derechos para evitar problemas con tu empresa. Si tienes dudas, puedes acudir a un abogado laboralista para que te asesore.

¿Quién me paga si estoy de baja y se acaba el contrato?

Si estás de baja médica y tu contrato de trabajo se acaba, lo normal es que sigas cobrando la prestación por desempleo hasta que puedas volver a trabajar. No obstante, hay algunas excepciones.

¿Qué pasa si estoy de baja y se acaba mi contrato?

Hay que tener en cuenta que, si estás de baja médica, tu contrato de trabajo sigue vigente. Esto significa que tu empresa no puede despedirte mientras estés de baja. No obstante, si tu contrato es temporal o tiene una duración determinada, y se acaba antes de que puedas volver a trabajar, lo más probable es que no puedas seguir cobrando la prestación por desempleo.

Por tanto, si estás de baja y se acaba tu contrato, lo primero que debes hacer es ponerte en contacto con tu empresa para que te expliquen cómo proceder. También puedes consultarlo en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

En cualquier caso, si no puedes volver a trabajar antes de que acabe tu contrato, lo más probable es que tengas derecho a cobrar la prestación por desempleo. No obstante, debes tener en cuenta que, en este caso, la prestación se calcula de forma diferente: en lugar de cogerla desde el primer día de desempleo, se empieza a cobrar a partir del día en que finaliza el contrato.

¿Qué pasa si mi contrato es indefinido?

En el caso de que tu contrato sea indefinido, y no puedas volver a trabajar antes de que acabe tu baja médica, lo más probable es que te acogas a una excedencia. Se trata de una situación en la que te tomás un tiempo libre del trabajo, pero sigues manteniendo tu puesto de trabajo.

En este caso, no tendrás derecho a cobrar la prestación por desempleo. No obstante, si en algún momento decides dejar definitivamente tu trabajo, podrás cobrar la prestación por desempleo a partir del día en que te desplaces a tu situación de desempleo.

¿Dónde llevar los partes de baja si me despiden?

Si te despiden de tu trabajo, debes llevar los partes de baja a la oficina del seguro social. Allí, un funcionario te dará una citas para que puedas solicitar el subsidio por desempleo.

Para solicitar el subsidio por desempleo, debes acreditar que estás buscando activamente un nuevo empleo. Para ello, debes presentar una hoja de inscripción en el servicio de empleo, así como entrevistas de seguimiento que acrediten que has estado buscando activamente un nuevo empleo.

Una vez que hayas solicitado el subsidio por desempleo, la oficina del seguro social te informará de cuánto dinero recibirás y por cuánto tiempo. Normalmente, el subsidio por desempleo se cobra por un período de tres meses.

Si después de tres meses sigues sin encontrar un nuevo empleo, puedes solicitar una prórroga del subsidio por desempleo. Para ello, debes dirigirte de nuevo a la oficina del seguro social y presentar nuevamente la documentación que acredite que has estado buscando activamente un empleo.

También puedes solicitar una prórroga del subsidio por desempleo si tu situación económica ha cambiado significativamente desde que se concedió el subsidio. Por ejemplo, si has perdido tu vivienda o si has tenido un hijo.

En cualquier caso, es importante que mantengas el contacto con la oficina del seguro social y que presentes la documentación necesaria a tiempo, ya que de lo contrario puedes perder el derecho al subsidio.

¿Cómo avisar al SEPE que estoy de baja médica?

Para avisar al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) de que estás de baja médica, debes enviar una solicitud por escrito. Puedes hacerlo a través del formulario online del SEPE, por correo postal o enviando un fax.

La solicitud de baja médica debe ir acompañada de la documentación que acredite que estás realmente de baja. En concreto, necesitarás adjuntar un informe médico que acredite la incapacidad temporal por enfermedad o accidente. Este informe médico debe expedirse en los últimos tres días a partir de la fecha de inicio de la baja.

Una vez que el SEPE reciba tu solicitud y la documentación, te enviará una carta confirmando que ya estás de baja. A partir de ese momento, empezarás a recibir la prestación por desempleo que te corresponda.

En el caso de que no estés dado de alta en el régimen general de la Seguridad Social, no podrás solicitar la prestación por desempleo. En este caso, deberás acreditar tu situación de desempleo ante el SEPE para poder acceder a las prestaciones por desempleo.