¿Cómo puedo pasar de incapacidad permanente total a absoluta?
La incapacidad permanente total es una situación en la que una persona se ve imposibilitada para realizar cualquier tipo de actividad laboral. En España, según el Real DecretoLegislativo 8/2004, se considera que una persona tiene esta situación de incapacidad permanente cuando su grado de discapacidad es igual o superior al 65%. Aunque, en algunos casos excepcionales, se puede considerar que una persona tiene esta situación de incapacidad permanente con un grado de discapacidad igual o superior al 33%.
La incapacidad permanentetotal absoluta es una situación en la que una persona se ve imposibilitada para realizar cualquier tipo de actividad laboral y, además, presenta una situación de dependencia. En España, según el Real Decreto Legislativo 8/2004, se considera que una persona tiene esta situación de incapacidad permanente total absolutacuando su grado de discapacidad es igual o superior al 100%.
Para solicitar el cambio de situación de incapacidad permanente total a incapacidad permanente total absoluta, la persona deberá dirigirse a la mutualidad a la que esté afiliada y solicitar el inicio del procedimiento. En este procedimiento se evaluará la situación de dependenciade la persona.
¿Cuándo se puede pedir la incapacidad absoluta?
La incapacidad absoluta es una prestación a la que pueden tener derecho las personas que, como consecuencia de una enfermedad o de un accidente, se vean imposibilitadas para realizar cualquier actividad laboral. Esta prestación está regulada en el Real DecretoLegislativo 8/2015, de 30 de octubre, que modifica el texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social, aprobado por el Real Decreto Legislativo 1/1994, de 20 de junio.
Para acceder a la incapacidad absoluta, es necesario que el INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) reconozca que la persona sufre una discapacidad que le impide el desempeño de su actividad laboral de forma permanente o durante un plazo superior a 6 meses. Asimismo, el solicitante de la prestación debe reunir los requisitos mínimos establecidos en la legislación vigente, entre los que se encuentran los siguientes:
- Estar en situación de alta o baja en el régimen general de la Seguridad Social.
- No poder desempeñar una actividad laboral compatible con su gradode discapacidad.
- No percibir otra prestación por incapacidad por una causa distinta a la que da lugar a la solicitud de la incapacidad absoluta.
Una vez que se ha superado el periodo de carencia establecido (90 o 360 días, en función de la causa de la incapacidad), la persona percibirá una prestación mensual que será del 65% de su base reguladora en el caso de que tenga derecho a la pensión de invalidez o del 100% en el caso de que se trate de una pensión de viudedad o de orphanidad.
La prestación por incapacidad se mantiene hasta que el INSS revisa la situación de la persona y, en función de su gradode discapacidad, decide si se mantiene, se modifica o se extingue la prestación. Asimismo, la prestación por incapacidad se puede suspender temporalmente cuando el beneficiario realiza actividades que supongan una mejora de su estado de salud.
¿Qué ventajas tiene una persona con incapacidad permanente absoluta?
La incapacidad permanente absoluta es una condición médica en la que la persona afectada no puede realizar ninguna actividad laboral y, por lo tanto, requiere de asistencia constante. Esto quiere decir que la persona no puede valerse por sí misma y necesita de cuidados especiales.
La ventaja principal de tener esta condición es que se puede acceder a una pensión por invalidez. Esta pensión es una prestación económica mensual que se otorga a las personas que no pueden trabajar debido a su enfermedad o discapacidad. Otra ventaja es que se puede acceder a ayudas técnicas para facilitar la vida diaria, como por ejemplo, sillas de ruedas, prótesis, etc.
En general, las personas con incapacidad permanente absoluta tienen derecho a una serie de prestaciones y ayudas por parte del estado, como por ejemplo, el acceso a la sanidad gratuita, a la vivienda protegida, a becas y ayudas para estudiar, etc. También se les facilita el acceso a trabajos protegidos y a medidas de inserción laboral.
En resumen, las principales ventajas de ser una persona con incapacidad permanente absoluta son:
- Tener derecho a una pensión por invalidez.
- Tener derecho a ayudas técnicas.
- Tener derecho a una serie de prestaciones y ayudas por parte del estado.
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