¿Qué necesito para pedir una excedencia?

Para poder pedir una excedencia, lo primero que necesitas es tener un contrato laboral con la empresa en la que trabajas. En el contrato deberá aparecer claramente la modalidad de excedencia que se aplica en tu caso. Si no estás seguro de qué tipo de excedencia te corresponde, puedes consultarlo en el sindicato de tu categoría o en la oficina de empleo más cercana.

Una vez que sepas qué tipo de excedencia te corresponde, deberás solicitarla por escrito a tu empresa. En la solicitud deberás especificar el motivo por el que solicitas la excedencia, así como el periodo de tiempo durante el cual estarás ausente. Si tu empresa no tiene un modelo de solicitud de excedencia, puedes descargar uno de internet o solicitarlo en tu oficina de empleo.

Una vez que hayas entregado la solicitud de excedencia a tu empresa, ésta tendrá 15 días hábiles para responderte. Si la solicitud es aceptada, la empresa deberá hacerte llegar un acuerdo por escrito donde se especifique el periodo de tiempo de la excedencia, así como las condiciones en las que se realizará. Si la solicitud es denegada, la empresa deberá notificarte por escrito los motivos de la negativa.

El periodo de excedencia que se establezca en el acuerdo deberá ser inferior a 2 años. Si deseas ampliar el periodo de excedencia, deberás solicitarlo por escrito a tu empresa con al menos 15 días de antelación a la fecha en la que finalice el periodo de excedencia inicialmente acordado.

¿Cuánto tiempo se tarda en conceder una excedencia?

Una excedencia es un periodo de tiempo durante el cual un trabajador deja de trabajar para dedicarse a otra actividad, ya sea por motivos personales, familiares o profesionales. En España, las excedencias se regulan en el Real Decreto Ley 3/2012 de 10 de febrero, que establece que todos los trabajadores tienen derecho a solicitar una excedencia por un máximo de cinco años, siempre y cuando cumplan ciertos requisitos.

Para solicitar una excedencia, el trabajador debe comunicar su decisión al empresario con, al menos, 15 días de antelación. Si el empresario no concede la excedencia o no responde en el plazo de 15 días, el trabajador puede acudir a la Inspección de Trabajo para que resuelva el conflicto.

Una vez que se ha comunicado la decisión de solicitar una excedencia, el empresario tiene 15 días hábiles para responder. Si el empresario no responde dentro de este plazo, se considerará que ha aceptado la solicitud de excedencia.

En el caso de que el empresario no esté de acuerdo con la solicitud de excedencia, debe comunicarlo al trabajador por escrito y motivar su decisión. Si el trabajador no está de acuerdo con la decisión del empresario, puede acudir a la Inspección de Trabajo para que resuelva el conflicto.

¿Cuánto tiempo antes hay que avisar de una excedencia en el trabajo?

Hay que avisar con la máxima antelación posible. No obstante, según el artículo 43.2 del Estatuto de los Trabajadores, el empresario debe conceder la excedencia solicitada siempre que no perjudique el normal funcionamiento de la empresa. En cualquier caso, el empresario debe notificar por escrito al trabajador la decisión de conceder o denegar la excedencia, a más tardar en el momento de notificarle la decisión de denegación de la misma.

Por tanto, aunque la antelación sea un requisito importante, no es el único. En el supuesto de que el empresario considere que la concesión de la excedencia perjudica el normal funcionamiento de la empresa, puede denegarla. No obstante, debe justificar debidamente su decisión y notificarla al trabajador por escrito.

¿Cuánto es lo minimo que se puede pedir una excedencia?

Una excedencia se define como un permiso otorgado por una empresa a un empleado para que este deje de prestar sus servicios durante un tiempo determinado, el cual puede ser de unos pocos meses o incluso de unos pocos años. Existen diversos motivos por los cuales se puede solicitar una excedencia, tales como: estudios, maternidad/paternidad, cuidado de familiares, etc.

En cuanto al tiempo de excedencia, éste suele ser de un mínimo de 3 meses y un máximo de 2 años, aunque esto puede variar en función de la empresa y el país en el que se encuentre. Durante el tiempo de excedencia, el empleado no estará laborando para la empresa y, por lo tanto, no percibirá sueldo ni beneficios laborales. No obstante, el empleado seguirá siendo vinculado a la empresa y, por lo tanto, conservará su contrato de trabajo. Una vez que el empleado finalice el periodo de excedencia, podrá reincorporarse a la empresa y retomar su puesto de trabajo.

Por lo general, el empleado debe solicitar la excedencia por escrito a la empresa con antelación. Asimismo, el empleado debe aportar documentación que acredite el motivo de la excedencia, como por ejemplo, un certificado médico en el caso de una maternidad/paternidad o un certificado de matrícula en el caso de una excedencia para estudios. La empresa, por su parte, debe notificar por escrito al empleado la decisión sobre su solicitud de excedencia.

¿Que te pagan cuando pides excedencia?

Si decides tomar excedencia, la mayoría de los puestos de trabajo te permitirán conservar tu puesto de trabajo y tu salario. Sin embargo, algunos puestos de trabajo requieren que dejes tu puesto y tu salario por un período de tiempo determinado.

En la mayoría de los casos, la excedencia es una opción que se ofrece a los empleados para que puedan tomar un descanso de su carrera profesional, ya sea para estudiar, para cuidar de un familiar o para hacer un viaje.

Aunque la excedencia es una opción voluntaria, algunas empresas ofrecen excedencias forzosas como parte de un ERE o un despido improcedente. En estos casos, el empleado puede optar por conservar su puesto de trabajo y su salario durante el período de excedencia, o bien puede renunciar a su puesto y recibir una indemnización por despido.

En algunos casos, la excedencia puede ser una buena opción para los empleados que necesitan tomar un descanso de su carrera profesional. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la excedencia puede tener un impacto negativo en la carrera profesional, ya que puede ser difícil volver a conseguir un puesto de trabajo después de una excedencia.